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jueves, 7 de julio de 2011

Casi un lustro, casi más II parte

Le conté que me caso  
 - le dije a mi mejor amiga, amiga que sabia de cada paso que yo daba con mi pequeño. Desde aquel 1er día que fuí a su casa, desde que decidí por primera inundarme de tanta juventud.
Pensé que esa conversación sería el punto final que terminaría con estos encuentros clandestinos..Pero (amo totalmente los "peros") 
a veces las pasiones más desenfrenadas suelen perdurar en el tiempo...
 aún a pesar del entorno y las vueltas de la vida..
Así fue como el tiempo del vestido blanco se acercaba, era imposible contener esa felicidad que me circundaba, sin embargo, de vez en cuando me acordaba de él, esos martes en los que eramos uno..en donde no nos importaba nada, en donde verdaderamente eramos nosotros como un todo..
Después de ese encuentro, nuestro último encuentro (eso creía yo)
 lo ví dos veces más.. en aquella primera vista después de "ese" día, pasé por su casa, casa que conocía desde hace más de un lustro, casi una década, en donde jugaba con muñecas y corría detrás de ese cachorro.. 
animal que sería el único testigo de tantos encuentros furtivos.. 
Sospeché que estaba su flia, pero no fué así.. con una sonrisa en la boca, me acerqué al timbre y lo presioné dos veces ( como solía hacerlo) y salió a la puerta él.. alto, flaco, extremadamente flaco, unos tonos rubios en sus cabellos cortos..su cara de pocos amigos..sus ojos..
Me miró sorprendido, hacía ya casi dos meses que no nos veiamos.. mi visita lo sorprendió, como a mí su presencia tan nítida..
Les traigo la invitación- titubee en voz placidamente baja. 
¿Al final nunca más nosotros?- me preguntó tan frío y amoroso como siempre
El sonido de mi respuerta acompañó a mi cabeza.. ambos sabiamos que era NO
Le entregué la invitación caradura, casi con los ojos llorozos, llorozos por ambos, inocente y frío la tomó, y sin emitir ninguna palabra se retiró..
La segunda vez, fué tal vez la más crucial. A un mes de mi definitivo si, nos volviamos a cruzar..
Esta vez estaba más decidida que ya habiamos terminado todo, y que ninguno de los dos queriamos algo ( al menos eso pensaba yo). En mi casa terminando un diagnóstico, tocan el timbre.. 
Ví por el mirador, y estaba ahí parado, mirando el suelo. Abrí la puerta sin dudar..
Y de arrebatados, nos robamos un beso...

Continuará..

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